Clasificación de las causas de las agresiones escolares
By admin on Friday, November 25th, 2011 | No Comments
Como ya hemos explicado, el bullying no se debe a un solo factor, sino que puede tener múltiples causas. Según los estudios estadísticos realizados, podemos dividir las causas del bullying en seis grandes grupos. Hay que tener en cuenta que, en la mayoría de casos de acoso escolar, las razones no se englobarán en uno solo de los grupos, sino que podremos encontrar que el agresor está influido por razones de varios de los grupos citados a continuación:
Razones que dan los propios agresores:
- Por pasar un rato o por divertirse.
- Por gastar una broma a la víctima: Cuando el acosador se defiende con esta excusa, vemos que no ha aprendido a empatizar con los demás ni a comprender los derechos y sentimientos de los otros, ya que no puede concebirse que una acción en la que se daña, ya sea física o psicológicamente, a otra persona de manera sistemática pueda entenderse como una broma.
- Para defenderse ya que se siente provocado: El agresor intenta evadir la responsabilidad negando la evidencia mediante excusas y mentiras (“Él me atacó primero”, “Él se lo buscó”, “Yo no quería hacerle daño pero él me provocó”).
- Porque siente unos deseos incontrolables de molestar a otros: Esta razón se da entre chicos con poca tolerancia a la frustración y un escaso control de sus impulsos.
- Porque él también es agredido por otros: El agresor se siente justificado con esta razón para hacer daño a los demás.
- Porque la víctima le cae mal.
- Porque intenta sentirse incluido en el grupo de amigos a través de sus conductas de acoso.
Razones según las características de las víctimas:
- Por ser distintos a los agresores o poseer rasgos diferenciales (tartamudear, llevar gafas, tener sobrepeso…)
- Por ser más débiles.
- Por no ser capaces de responder al asedio de su agresor.
- Por poseer alguna cualidad que le hace superior a los ojos de su agresor, despertando su envidia (sacar mejores notas, ser mejor en algún deporte…).
- Para hacerle llorar, mofarse de él, reírse cuando se equivoca… Muchos acosadores reconocen que sienten odio hacia la victima sin ninguna razón aparente.
Razones familiares:
- Alto grado de desestructuración en la familia del agresor.
- Carencias afectivas en la educación del agresor: Los niños pasan solos mucho tiempo, los padres están muy ocupados para escucharles, no tienen supervisión… La personalidad tiránica y agresiva se forma en los primeros años de vida del niño y va reforzándose durante toda la infancia y la adolescencia.
- Identificación de los agresores con modelos basados en el dominio y la sumisión: Interpretan que sólo se puede ser agresor o agredido, por lo que desarrollan conductas agresivas para impedir que alguien les convierta en víctimas.
- Alta permisividad de los padres respecto al acceso a la violencia (ya sea en directo en el ámbito familiar o social o a través de los medios de comunicación). El niño o adolescente puede desarrollar conductas agresivas por imitación de los modelos que ve en su vida diaria.
Razones sociales y ambientales:
- Ausencia total de valores familiares y sociales: Los jóvenes se mueven por valores individualistas, como el éxito profesional, el dinero o el ocio pero no desarrollan valores éticos y de convivencia.
- Los adolescentes pueden desarrollar conductas agresivas como oposición a las reglas o figuras de autoridad impuestas (padres, profesores…).
- Los adolescentes pueden desarrollar conductas agresivas porque sus relaciones sociales no son satisfactorias o porque viven en ambientes con mucho estrés.
Razones escolares:
- En muchas ocasiones los casos de bullying pueden estar influidos por las condiciones socioeconómicas de su centro escolar (centros en zonas deprimidas y conflictivas).
- La ampliación de la educación obligatoria obliga a muchos jóvenes a continuar en los centros educativos en contra de su voluntad, por lo que pagan su frustración con compañeros más débiles.
- La masificación de los centros de enseñanza puede favorecer la aparición del bullying, ya que provoca más roces entre los alumnos y no es posible un control y vigilancia adecuados por parte del profesorado.
- Falta de preparación del profesorado: Los profesores reconocen que no disponen de la formación necesaria para enfrentarse a casos de acoso escolar tan violentos como los que se producen en algunas escuelas hoy en día. Hay ocasiones en las que incluso los mismos profesores llegan a convertirse en víctimas de los grupos de acosadores.
- En la escuela actual esta “prohibido prohibir”: Muchos profesores señalan que, a día de hoy, no son capaces de imponer disciplina y que, muchas veces, son los propios padres los que les niegan la razón sistemáticamente, poniéndose siempre de parte de los hijos sin importar lo que hayan hecho. En este contexto, la figura del profesor se queda vacía, sin ninguna autoridad para ejercer su función.
- En el contexto escolar, el agresor suele encontrar un grupo de testigos que le animan e incitan, lo que refuerza aún más su conducta. Mientras la actitud de los testigos no cambie hacia la denuncia y la oposición a las conductas de acoso, el problema del bullying seguirá existiendo. Por eso es imprescindible impartir programas de sensibilización en las escuelas sobre este problema.
Razones de tipo psicológico:
- El agresor no tiene empatía, no siente remordimientos ni culpabilidad.
- El agresor suele ser una persona con baja autoestima, que intenta superar aterrorizando a sus víctimas. Suele culpar a los demás de su situación y desarrolla fuertes deseos de venganza.
- El agresor usa el acoso como un mecanismo de defensa: Al mostrarse violento y agresivo, se asegura de que los demás no lo vean como una posible víctima.
- El agresor no dispone de herramientas no violentas para resolver sus conflictos.
- El acosador escolar suele tener una personalidad arrogante, intolerante y fracasada, además de carecer de la capacidad de ponerse en el lugar de los demás.
- El agresor suele tener problemas para controlar sus impulsos y enfocan su odio y rabia hacia los demás.